Los policías realizaban labores de prevención de la seguridad ciudadana cuando fueron requeridos por el vuelco de un vehículo en la avenida Virgen de Loreto, una de las principales vías del municipio, situada junto al Centro de Seguridad de la propia Policía Local. Al parecer el coche subió accidentalmente dos de las cuatro ruedas a la acera, volcando para quedar sobre la calzada sin que otros coches se vieran envueltos en el accidente.

Personados en el lugar del accidente, los agentes asistieron y tranquilizaron al conductor del automóvil que no presentaba en apariencia lesiones de consideración, pero que se encontraba muy nervioso al encontrarse atrapado en el interior del vehículo. Inmediatamente llegaron al lugar una ambulancia y los bomberos que le sacaron del coche para que fuera atendido por los facultativos.

Los agentes pudieron observar como en el interior del automóvil, había una botella de cerveza de un litro vacía que venía a corroborar el estado de embriaguez que parecía presentar el conductor accidentado que fue sometido a la prueba de alcoholemia, dando un resultado positivo que triplicaba la tasa máxima permitida por la normativa de tráfico. El individuo reconoció además a los agentes que había tomado medicamentos antidepresivos que pueden potenciar los efectos del alcohol. Por todo ello, los agentes inmovilizaron el vehículo, imputándose al conductor un delito de conducción bajo la influencia de bebidas alcohólicas.

“Afortunadamente este aparatoso accidente no provocó daños personales, pero pone de manifiesto lo peligroso que puede ser conducir bajo los efectos del alcohol también dentro de la ciudad por lo que es necesario concienciarse que cuando se va a utilizar el coche aunque sea para un trayecto urbano y breve, hay que estar en condiciones óptimas para no poner en peligro a otros conductores, a uno mismo e incluso a los peatones”, explicó José Miguel Martín Criado, concejal de Seguridad, Deportes y Juventud.