Carnicer Torrejón sabe muy bien lo que es ganar y eliminar a equipos de Primera División en esta Copa del Rey. Lo hizo con Umacón Zaragoza en la tercera ronda de la competición y repitió experiencia con Caja Segovia en octavos de final. Ambos sucumbieron al poder de un equipo peleón, rebelde, joven e ilusionado con hacer una gran campaña en la Copa del Rey. De esta forma llego ayer el encuentro de cuartos de final, donde los torrejoneros volvieron a dar una cátedra de casta, buen juego, corazón, voluntad, carácter e ilusión, haciendo vibrar a un Pabellón Jorge Garbajosa en el que sus espectadores acabaron rindiéndose a su equipo.

El resultado fue una pena y estuvo condicionado por unos primeros diez minutos en los que el Barcelona aprovechó los errores para matar la eliminatoria a la primera de cambio. Así, Aicardo en el primer minuto de juego batió a Mendiola, poniendo por delante a los azulgranas que no suelen desperdiciar su ventaja. De esa manera llegó el segundo gol del partido en una jugada rara, ya que el tanto de Torras, un golazo desde la línea lateral, vino precedido de un paradón de Mendiola tras un lanzamiento de Lozano desde el punto de penalti.

Aún así, los torrejoneros fieles a su estilo, no daban un balón por perdido y presionaban la salida del esférico de su rival de manera que Kike tuvo en sus zapatillas el 1-2, que se marchó desviado en un disparo ajustado al poste, pero el resultado en el Jorge Garbajosa continuó inclinándose hacia el lado azulgrana gracias a un nuevo tanto de Ari justo en el ecuador de la primera mitad. Con 0-3 y viendo en frente al Barça, cualquier equipo hubiera desistido en su empeño, pero los torrejoneros siguieron creyendo en sus opciones y sin bajar en ningún momento los brazos, comenzaron a meterse de nuevo de lleno en el partido, llegando la recompensa a su esfuerzo al filo del descanso cuando Caio batió a Paco Sedano en un remate a su palo largo, finalizando el primer tiempo con 1-3.

Ya en la segunda mitad, Carnicer Torrejón se transformó, sacudiéndose el dominio de su rival y dando de manera espectacular la vuelta a la inercia del juego, protagonizando las mejores ocasiones y acercando el gol a sus dominios. El Barcelona, sorprendido, dio un paso atrás defendiendo con uñas y dientes su meta ante un rival que atacaba por todos los flancos, siendo Paco Sedano el jugador más destacado en esta segunda mitad.

El paso de los minutos, el ímpetu local y las ocasiones torrejoneras hicieron que en el minuto 34 Caio se enfundara la camiseta de portero-jugador, contando de nuevo con grandes ocasiones para haber metido picante al encuentro, aunque al final los torrejoneros, a pesar de dejarse la piel en cada jugada, no vieron recompensado su esfuerzo y trabajo incansable, siendo el premio de la clasificación para el F.C. Barcelona Alisport.